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OVIEDO 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha informado este sábado de la detención de un hombre de 50 años como supuesto autor de un delito de hurto de cable de cobre. Según la Benemérita podría formar parte de un grupo de delincuencia organizada dedicada a la sustracción de tendido de cable de telefonía. Fue detenido en el occidente asturiano cuando conducía una furgoneta. Las otras tres personas que estaban cargando el vehículo se dieron a la fuga.
Según ha informado la guardia Civil, se trataría de un grupo asentado en Girona que se desplaza por todo el territorio nacional. El modo de operar es retirar el cable hacíendose pasar por personal de la empresa de telefonía, cortarlo, pelarlo y dejarlo escondido preparado para su posterior recogida.
Fue este mes de julio cuando la Guardia Civil detectó en varios puntos del occidente asturiano la existencia de cable de cobre o restos de funda de este cable escondido en varios puntos.
En concreto, en la zona de Mohías (Coaña) se localizaron en una finca numerosos trozos de manguera de un metro de longitud, sin el cable en su interior (sólo las fundas o cubiertas exteriores).
En un maizal de Serantes (Tapia de Casariego), se encontró también numerosos fardos de cables de cobre de la misma longitud, es decir un metro, en esta ocasión sin las fundas, preparados posiblemente para su recogida. También se localizó cableado de telefonía cortado en las proximidades de la gasolinera de Chiquín, Serantes (Tapia de Casariego).
De igual manera, se tuvo conocimiento a través de algún vecino de Castropol, que habían intentado acceder a su propiedad para retirar cableado de telefonía, haciéndose pasar por trabajadores de una compañía telefónica.
Asimismo, se recibieron dos denuncias por la sustracción de 1.466 metros de cableado con un peso estimado de 4.227 kilos y valorado en unos 10.000 euros en el tramo de Serantes y otra de unos 721 metros (1.234 kilos) valorados en unos 8.000 euros en un tramo próximo a Castropol.
El operativo establecido en las zonas afectadas dio resultado positivo en la madrugada del día 25 de julio, cuando una patrulla de la Guardia Civil de Vegadeo detectó la presencia de un furgón parado a la altura del punto kilométrico 544 de la N-634, donde se habían localizado días antes fardos escondidos, con el objeto de recogerlo.
En la actuación resultó detenido el conductor de la furgoneta, un vecino de Barcelona de 50 años, dándose a la fuga las tres personas que estaban cargando el cable en su interior. De lo actuado entiende el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Castropol.
Las investigaciones determinaron que el detenido conformaría parte de un grupo de delincuencia organizado con asentamiento en Girona, integrada por personas de nacionalidad marroquí y españoles, quienes se desplazan por todo el territorio nacional para hacerse con él.
Según pudo conocer la Guardia Civil, a través de la compañía telefónica propietaria del cable, desde el mes de mayo, se está llevando a cabo en toda España la baja de la línea de cobre, teniendo pendiente su recogida por personal habilitado.
El modo de operar de estas personas en la mayoría de las ocasiones es utilizar identificaciones falsas de la empresa de telefonía (únicos habilitados para su recogida), para quitarlo de los postes, sobre todo en zonas aisladas. Posteriormente los trocean y los pelan en el mismo lugar (donde abandonan las fundas).
Una vez pelados los dejan depositados en fardos de un metro de longitud y unos 40 o 50 kilos de peso cada uno para facilitar sus transporte, ocultándolos hasta que es recogido. Esta labor lleva tiempo, por lo que es previsible que permanezcan varios días por la zona.
La recogida la efectúan habitualmente de noche, cuando tienen acumulada una determinada cantidad, en furgonetas o pequeños camiones de alquiler que se desplazan desde Girona. Finalmente regresan hasta allí con la carga, lo que dificulta el seguimiento del material sustraído. En los últimos meses se han detectado varios grupos organizados que actúan de este modo en toda la cornisa cantábrica.
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