La Reina Letizia, de luto riguroso por la muerte del Papa Francisco en el almuerzo por el Premio 'Miguel de Cervantes'

   MADRID, 22 Abr. (CHANCE) -

   Tras asistir este mediodía junto a la Reina Sofía a la Nuncia Apostólica de Madrid para firmar el libro de condolencias en honor al Papa Francisco tras su fallecimiento este lunes 21 de abril, los Reyes Felipe y Letizia se han dirigido al Palacio Real para ejercer de anfitriones en un almuerzo ofrecido a una representación del Mundo de las Letras, con ocasión de la entrega del Premio de Literatura en Lengua Castellana 'Miguel de Cervantes' 2024.

Un solemne acto que tendrá lugar este miércoles 23 de abril en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá, que está dotado con 125.000 euros y que en esta ocasión recaerá en Álvaro Pombo por "su extraordinaria personalidad creadora, su lírica singular y su original narración. A su notabilísimo nivel como poeta y ensayista, se une el ser uno de los grandes novelistas de nuestra lengua que indaga en la condición humana desde las perspectivas afectivas de unos sentimientos profundos y contradictorios".

Quien sabe si por disponer del tiempo justo, o en señal de respeto al sumo Pontífice -todo apunta a que ha sido esto último- la Reina ha lucido el mismo estilismo que en su visita a la Embajada de la Santa Sede en nuestro país para transmitir sus condolencias por la muerte de Jorge Mario Bergoglio, un 'total look' negro con el que ha dado una nueva lección de elegancia en su versión más sobria.

De riguroso luto, Doña Letizia ha escogido un vestido midi de manga larga con cuello a la caja, cuerpo ceñido y falda con silueta evasé y ligero vuelo, que ha combinado con un cinturón estrecho para realzar su cintura y salones negros de tacón kitten. La única diferencia con su visita a la Nuncia Apostólica, que en el almuerzo ha prescindido de bolso, el modelo Victoria Insignia de Carolina Herrera en negro que se ha convertido en uno de sus imprescindibles.

Un almuerzo en el que ha destacado la enorme complicidad de los Reyes, que no han dejado de intercambiar sonrisas y miradas de lo más significativas que reflejan el gran momento que atraviesa su relación a punto de celebrar su 21º aniversario de matrimonio.