MADRID 26 Ago. (EUROPA PRESS) -

Uno de los grandes placeres de viajar es descubrir la gastronomía del destino y dejarse conquistar por sus sabores más auténticos. En Mallorca, tierra de tradiciones centenarias y productos únicos, Zafiro Palace Andratx ha querido rendir homenaje a su herencia culinaria con una propuesta irresistible: la 'Merienda Mallorquina', una experiencia que acerca lo mejor de la isla a los paladares de sus huéspedes.

Ubicado en lo alto de Camp de Mar, este exclusivo hotel ofrece un escenario privilegiado con vistas al Mediterráneo y a la Sierra de Tramontana, declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO. Un entorno idílico para saborear un tentempié que combina la sencillez de los productos locales con la riqueza cultural de Mallorca.

La experiencia comienza con una selección de aceitunas mallorquinas, aceite de oliva local y embutidos tradicionales, con la icónica sobrasada como gran protagonista. A ello se suman el pan payés artesano, el tomate de ramallet rallado, el queso de Mahón con Denominación de Origen y el siempre apreciado jamón ibérico.

Para continuar, el viajero se adentra en las recetas más populares de la isla con los cocarrois -pasteles rellenos de verduras- y las empanadas mallorquinas, que reflejan la esencia de la cocina casera balear.

El broche de oro llega con el lado más dulce de la isla: la ensaimada, reina de la repostería mallorquina, y el cremadillo, relleno de crema pastelera, ponen el punto final a esta completa merienda.

Además de poder disfrutarse en las terrazas y espacios comunes del hotel, la 'Merienda Mallorquina' está disponible como servicio de habitaciones, presentada en una cesta artesanal, para degustarla en la intimidad de la habitación, junto a la piscina privada o en la terraza con vistas panorámicas.

Con esta propuesta, Zafiro Palace Andratx reafirma su compromiso con la gastronomía local y con la creación de experiencias memorables para sus huéspedes. A ella se suma su ya amplia oferta con cinco restaurantes y cuatro bares, que recorren sabores del mundo sin perder nunca la conexión con la isla.