Militantes del sindicato se concentran ante las sedes de ambos partidos en Bilbao durante las protestas para denunciar el genocidio en Gaza

BILBAO, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -

El sindicato ELA se ha concentrado este miércoles ante las sedes en Bilbao de PNV y PSE-EE para exigirles que se dejen de "hipocresía", "corten toda relación comercial, económica y militar con Israel" y se sumen a las iniciativas internacionales para acabar con la "impunidad" del gobierno israelí y sentar en el banquillo a Benjamin Netanyahu.

Este mensaje ha sido trasladado por el secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza, durante ambas concentraciones, en las que han participado centenares de militantes del sindicato que han portado banderas palestinas, portado fotos de víctimas de Gaza y exhibido carteles con la cifra "67.194" con el número de muertos contabilizados a 9 de octubre de 2025. También se ha pintado ese número en un mural mientras Lakuntza se dirigía a las personas concentradas.

Los participantes en las movilizaciones han protagonizado sendas sentadas ante las sedes de ambos partidos, primero ante los socialistas vascos y, posteriormente, han marchado en manifestación hasta Sabin-Etxea, en Jardines de Albia, tras una pancarta donde podía leerse "Boicot a Israel" y entre lemas como "Palestina askatu" o "No es una guerra, es un genocidio".

Ante los medios, y también durante las concentraciones, Lakuntza ha subrayado en primer lugar que el paro general convocado por ELA en solitario, en paralelo a las movilizaciones conjuntas convocadas por el resto de sindicatos, había tenido "tal seguimiento que la exigencia a empresas y Gobiernos para que corten todas sus relaciones con Israel se ha elevado significativamente". "Ya no hay excusas", ha enfatizado.

Lakuntza ha considerado que la respuesta a las movilizaciones convocadas por su sindicato había sido "amplia e importante" y "eleva la exigencia y la presión sobre los gobiernos y las empresas que todavía, a día de hoy, mantienen esas injustificables y vergonzosas relaciones comerciales, económicas o militares con el gobierno de Israel".

"Es un mensaje claro. No se puede vender ni comprar nada a Israel y este es un mensaje directo a esos gobiernos y a esas empresas vascas que siguen manteniendo esas relaciones injustificables y vergonzosas con el gobierno de Israel", ha remarcado.

En este punto ha hecho una interpelación directa a los partidos vascos para que decidan "hasta qué punto van a llevar la determinación con respecto a la causa palestina y su actividad política en los parlamentos vascos, navarro y español va a ser determinante la posición para ayudar al pueblo palestino, detener este genocidio y elevar la exigencia de ruptura de relaciones con el gobierno israelí y la defensa del boicot".

"La pregunta es: ¿van a condicionar su apoyo a Sánchez a que el Gobierno español haga efectivo el boicot a Israel hasta que respete los derechos de Palestina?", se ha preguntado, para agregar que "las instituciones vascas y el Estado español deben sumarse a las denuncias internacionales y actuar para que quienes cometen crímenes contra la humanidad comparezcan ante la justicia internacional".

Tras afirmar que "el pueblo palestino tiene derecho a la justicia, la memoria, la verdad y la reparación", Lakuntza ha afirmado que el Plan de Trump busca "garantizar la continuidad de la ocupación de Palestina" puesto que, "no basta con obtener una pausa para que los y las palestinas no sean asesinadas", sino que "hay que exigir el fin de la ocupación y la condena del régimen de apartheid israelí y de cualquier política que impida a Palestina su existencia como pueblo libre".

Lakuntza ha concluido con un llamamiento a "seguir fortaleciendo la movilización, ahora más que nunca, porque existe el riesgo de que, en poco tiempo, esto pueda quedar en el olvido y para que, más allá de parar los bombardeos, parte de esta pelea sea también para seguir apoyando la causa palestina".

ELA convocaba este 15-O un paro general de cuatro horas en todos los centros de trabajo, en una iniciativa conjunta con los sindicatos CIG e Intersindical, para "dirigir con voz propia desde Euskal Herria, Galiza y Catalunya una exigencia directa y sin ambigüedades a Gobiernos y empresas, a diferencia de otras convocatorias con origen en el sindicalismo español de UGT y CCOO".

Asimismo, en Educación y sus sectores dependientes, la convocatoria era de huelga general para toda la jornada, y el seguimiento, tal y como han subrayado en un comunicado, "ha sido igualmente importante desde primera hora de la mañana".