Gobierno Vasco reconoce que Euskadi está ante "una encrucijada energética" y "es especialmente sensible" a retos de electrificación

SAN SEBASTIÁN, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -

El secretario de Estado de Energía, Joan Groizard, ha reivindicado este jueves en el Congreso anual de la Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica, CIDE, la "necesidad" de llevar "certidumbre" al sector y al mercado energético español. La cita ha reunido a más de 400 directivos, profesionales, expertos y representantes de la administración pública en el Palacio de Congresos Kursaal de la capital guipuzcoana.

Groizard ha participado en este evento junto con el presidente de CIDE, Gerardo Cuerva, y la viceconsejera de Transición Energética del Gobierno Vasco, Irantzu Allende.

En su intervención, el secretario de Estado de Energía, ha puesto en valor "el papel de las pequeñas operadoras en el sistema energético español" y se ha mostrado conforme con la "necesidad de llevar certidumbre" al sector y al mercado.

Además, ha destacado que "la energía es mucho más que un recurso, es una herramienta de subsistencia y de vertebración territorial y un vector de crecimiento y prosperidad para el entorno rural". "La transición energética no estará completa en España hasta que llegue a todos, hasta que cada pueblo, cada comarca pueda participar de ella y beneficiarse de sus oportunidades", ha sostenido.

Por su parte, Cuerva, ha reclamado que el nuevo modelo retributivo que está ahora en tramitación "preserve el equilibrio territorial y garantice que la transición energética llegue también al medio rural de forma equitativa y justa". "La eficiencia no puede medirse solo en euros, sino también en cohesión social y en igualdad de oportunidades", ha destacado.

Tras reconocer "los avances" introducidos por la CNMC en el segundo borrador del marco retributivo presentado el lunes pasado, ha advertido de que "persisten elementos que podrían provocar un grave quebranto en los servicios eléctricos que se prestan en las zonas rurales, especialmente si se reducen los recursos destinados a la operación y mantenimiento de las redes (OPEX)".

Además, ha apuntado que "los reducidos e hipotéticos ahorros que pueda darse serán insignificantes en comparación con el efecto negativo que tendrán a largo plazo en los social y en lo económico". "En un sistema, el eléctrico, que está cambiando de forma radical y a un ritmo vertiginoso, será difícil digitalizar las redes, protegerlas de ciberataques o hacer frente a eventos climatológicos adversos, cada vez más frecuentes y graves, si se reduce la capacidad para operar y mantener las redes", ha señalado.

Cuerva ha reclamado "certidumbre y estabilidad para seguir garantizando un servicio esencial al que tienen derecho las personas y empresas de las zonas rurales de nuestro país" y ha apuntado "la necesidad de que los operadores del sistema cuenten con suficientes recursos para dar el servicio de calidad que precisan miles de pueblos, donde el acceso a la electricidad es vital para el día a día de sus habitantes".

También ha reiterado la "voluntad de diálogo" de CIDE con el Ministerio y la CNMC para "alcanzar un modelo equilibrado que incentive la inversión en redes, fomente la eficiencia y contribuya a la descarbonización sin poner en riesgo la continuidad y la calidad del suministro en los territorios rurales".

Por su parte Allende ha destacado que Euskadi se encuentra ante "una encrucijada energética" y ha recordado que por su perfil industrial, altamente intensivo en consumo energético "es especialmente sensible a los retos de la electrificación".

En este sentido, ha señalado la "importancia de contar con unas redes de distribución robustas y ágiles, capaces de integrar la generación de forma cada vez más fluida, gestionar la demanda de forma inteligente, la actual y la nueva, y garantizar el suministro a toda la sociedad".